El bosque de los atletas se materializará en Tokio 2020

Las pasadas Olimpiadas de Rio 2016 fue la mejor oportunidad de afrontar la crisis ambiental que atraviesa el mundo y en especial en Brasil, con su amazonia en constante contaminación por la extracción de oro, contaminación de aguas y deforestación ilegal de uno de los principales bosques que produce un 50% de O2 necesario para la humanidad.

Brasil tiene historia de destrucción ambiental y ahora pudo aprovechar la ocasión para promocionar la preservación de la biodiversidad en el planeta tierra.

En el acto de apertura, aparte de todos los contenidos donde se quiso sensibilizar al mundo de la preservación ambiental, se centró en un evento único donde se le entregó a cada atleta presente una semilla de alguna especie originaria del Brasil, entregando más de 207 de especies para irlas sembrando en tubos de germinación y formar un bosque con más de 11000 árboles que llamarían “el bosque de los atletas” y así recuperar áreas que se han visto afectadas por la deforestación.

“Contenido ecológico y el origen de la humanidad fue la esencia en la inauguración de las olimpiadas de Río 2016”

Las semillas sembradas por los atletas en las olimpiadas de Río germinan

Los tubos de germinación donde 11 mil atletas olímpicos colocaron semillas de árboles se encuentran en Maracaná donde ya empiezan a germinar, aunque algunas se tomarán un poco más de tiempo en germinar. Estas plántulas serán llevadas al “bosque de los atletas” luego de un año, cuando estén aptas para el trasplante en agosto del 2017, tiempo en que alcanzarán unos 50cm de altura.

Esta idea ecológica surgió entre el comité olímpico por estar Brasil entre los países más contaminantes del mundo, asumiendo que ha llegado el momento de hacer frente a la crisis ambiental que parece haber cruzado una línea peligrosa para todo el mundo.

Las medallas no quedaron al margen de la preservación ambiental

Las preciadas medallas olímpicas se presentaron en una caja de madera en forma de piedra provenientes de bosques certificados para tal fin, esto quiere decir que en pro del ambiente se utilizó madera sin afectar todo un ecosistema, sino que esos bosques cumplen con una serie de normas ambientales, nada relacionado con las deforestaciones ilegales que se hacen a diario en esos bosques.

Brasil transmitió un mensaje de conciencia ecológica

Brasil no desaprovechó la oportunidad mediática que representan las olimpiadas, su mensaje obtuvo cobertura mundial con cifras aproximadas a los 4 mil millones de personas, tanto en la inauguración como en la ceremonia de clausura.

En Brasil es donde se conocen miles de especies animales y vegetales, especies exóticas nunca antes vistas, tiene las mayores reservas naturales que producen más del 30% del oxígeno que consume el planeta que también se ha visto afectada por el cambio climático.

“Brasil ha servido de mal ejemplo al no contribuir con la preservación ambiental de sus enormes reservas naturales, pero este fue un gran paso para ser ahora un buen ejemplo y además alentar al resto de los países a crear bosques y salvar al planeta”

Me pareció algo curioso cuando una integrante de la delegación china se vio emocionada de contribuir a ese proyecto colocando su semilla, no sin antes darle un beso, gesto que deja en claro la esperanza con que depositaba su semilla.

Esto se puede asociar al grave problema ambiental que vive hoy china debido a los altos niveles de polución que sobrepasan diez veces los niveles aceptados por la OMS y deja poco oxígeno para los habitantes de la capital.

Quizás esto la hizo consciente de lo que la contaminación es capaz de hacerle a la humanidad y de la contribución tan importante que estaba haciendo al colocar esa semilla y la esperanza que se convierta en un árbol que genere el oxígeno necesario, en teoría, para una persona.

Los “árboles atletas” como los llaman, se harán visible para los próximos juegos olímpicos de Tokio 2020. Esta es la promesa de los organizadores, dejar un legado que nunca antes ningún organizador hizo, además en un sector del bosque se sembrarán arboles con colores amarillo, gris y rojo en honor a los medallistas olímpicos del 2016. Esperemos ver el próximo bosque de los atletas mantengan la esperanza de dar una respuesta inmediata a la crisis ambiental que atraviesa el planeta tierra.