¿¡Es Realmente Ecología!?... o Modismo?

En estos últimos años hemos podido observar el gran auge que tiene el uso del término ecología y todo lo que deriva de él, como son los productos ecológicos, medidas ecológicas, autos ecológico, etc… lo cual en conjunto crean expectativas transformadas en una sensación y necesidad de llevar un mejor estilo de vida, que va desde el cambio de hábitos en que se viven normalmente (como adquirir un auto ecológico a costa de una menor potencia o de estar pendiente de seleccionar la basura entre orgánica o inorgánica por ejemplo) por un beneficio que no es tangible.

¿Qué es la ecología?

Para comenzar la ecología se define como una ciencia que estudia las relaciones existentes entre los seres vivientes y el medio en que viven, la ecología también se puede ver como “la defensa y protección de la naturaleza y del medio ambiente”, ambas concepciones las debemos tener presente.

Así podemos encontrarnos con Bolsas “ecológicas” en supermercados, pero que adquirimos con la misma frecuencia que una bolsa plástica común, bolsas ecológicas de fácil degradación para autos evitando que tiren a la calle desperdicios y a la misma bolsa, sin tomar conciencia del simple hecho de la contaminación que está causando ese mismo auto con emisiones de CO2 muy superiores a los 100 gramos de CO2 por cada kilómetro recorrido, promoción de actividades o acciones ecológicas por medio de panfletos hechos de papel obviamente proveniente de árboles, que viene acompañado de todo su proceso de producción contaminante, con tinta no biodegradable y que en su mayoría irá a parar a la calle, colocación de cestos para recolección de basura clasificada sin previa orientación ni seguimiento de las medidas, esto sólo es una pequeña muestra de las incongruencias en que vivimos.

“Ecológico” un término mal empleado a nivel mundial

A mi parecer la ecología o el uso del término es considerado y ha sido asumido por gobiernos y empresas como una oportunidad de negocio o de obtener algún beneficio de ello, esto lo realizan empleando jornadas que dibujan un noble objetivo principal como lo es la de crear conciencia de la preservación ambiental y el buen uso de los recursos naturales y en realidad no pasa más allá de ser tomada como una moda, desvirtuando así su verdadero objetivo, llevándolo lejos de ser un aprendizaje.

A través de esta “moda ecológica” se crea la oportunidad de sacarle partido al momento que se vive, que a la vez dan pie a generar nuevos modelos económicos y viendo aún más allá se generan cambios en los modelos agrícolas tradicionales. Sólo queda de nuestra parte encontrarle el verdadero sentido y darle la importancia de minimizar la contaminación que nuestro ambiente nos pide, ¿concientizamos el término “ecología” o lo usamos como un simple “modismo”?